Hay al menos una operación que el lenguaje de Teilhard no podía expresar: la creación inmediata del espíritu... la suscitación de una forma determinada de ser, la forma "inmaterial " por el llamado directo del Creador; porque si la conciencia está ya unívocamente presente en los organismos infrahumanos, de donde busca liberarse por presión y por ruptura, se hace difícil mantener que esos organismos no desempeñan ningún papel en la producción de la realidad espiritual en tanto tal.
sábado, 26 de septiembre de 2009
Creación y evolución (más conceptos)
jueves, 17 de septiembre de 2009
Creación y evolución (algunos conceptos)
Con respecto al monogenismo, él implica afirmar que el primer hombre y la primera mujer nacieron biológicamente a raíz de una mutación genética que les permitió el pensamiento reflexivo. Esta mutación genética pudo ser transmitida a su descendencia. Ese fue para los creyentes, el momento en que Dios dio a la primera pareja el alma espiritual que la humanizaría.
¿Que dice al respecto la ciencia? Los científicos se inclinan por el poligenismo. Prescindiendo de toda intervención providencial es la hipótesis que más se adapta a la gradualidad del proceso de hominización. Creen por otra parle poco probable que de una sola pareja haya podido surgir una descendencia que pudiera sobrevivir y multiplicarse. Vuelvo a repetir: "prescindiendo de la acción providencial". (…)
Los creyentes no podemos dejar de tener en cuenta que la Santa Sede ya dejó oír su palabra sobre este tema en 1950:
Dijo Pío XII en la “Humanis generis”:
Cuando se trata de la otra hipótesis, llamada poligenismo, los hijos de la Iglesia no tienen ya la misma libertad. En efecto, los fieles no pueden abrazar una doctrina cuyos mantenedores sostienen que después de Adán hubo sobre la Tierra verdaderos hombres que no descienden de aquél por generación natural como primer padre de todos, que Adán designa el conjunto de estos múltiples primeros padres. No se encuentra, en efecto, la manera de hacer concordar semejante doctrina con lo que enseñan las fuentes de la verdad revelada y con lo que proponen las actas del magisterio eclesiástico sobre e pecado original, pecado que toma su origen en un pecado verdaderamente personal, cometido por Adán, y que está en todos y que a cada uno pertenece porque se esparció por todos por la generación (12-8-1950).
La advertencia del Papa es razonable. Siendo la hipótesis del monogenismo aquella sobre la cual se estructuró la teología cristiana, no tiene sentido asumir las dificultades que una hipótesis distinta implica sin que haya sólidos argumentos científicos que la respalden.
Mientras no haya justificadas pruebas en contra deberá respetarse la frase de San Pablo: “Por un solo hombre el pecado y la muerte; por un solo hombre la redención y la vida” (Romanos V, 12).
Es obvio que si en algún momento se verifica científicamente la hipótesis poligenista los teólogos deberán hacer frente a este nuevo desafío.
Como el Papa [*] lo dice, algunos exegetas, anticipándose a la posibilidad científica del poligenismo, han afirmado que en el Génesis el término Adán, que en hebreo significa hombre, pretende referirse a la especie humana. Esto no es algo que se desprenda con claridad de los distintos textos de la narración yahvista, pero tampoco excluye que exista alguna interpretación compatible en tal sentido.
No faltan algunos científicos que aceptan la posibilidad del monogenismo. Hasta el momento ni una hipótesis ni la otra pueden basarse más que en conjeturas y parece imposible que pueda conseguirse información definitiva. Piénsese en efecto que aunque por absurda casualidad se encontraran los esqueletos de la primera pareja humana junto a otros representantes de su generación. ¿Cómo podría afirmarse que Dios otorgó a más de una pareja el alma espiritual?
domingo, 13 de septiembre de 2009
Creación y evolución (algo de poesía)
En el huevo oculta la célula se despierta:
“Di-os, Di-os” es el ritmo de veinticinco días.
Late, palpita en el seno la vida:
“Di-os, Di-os” es el ritmo de nueve meses.
¡Ay, si fallara! Mas vive la Fuerza y rige el Compás:
“Di-os, Di-os, Di-os!”
Palpita, se ríe, palpita y llora el loco corazón:
“Di-os, Di-os”, es ochenta el ritmo del pulso.
¡Ay, si fallara! ¡Se helaría la música viva
en los arroyos de sangre y roja volaría nuestra alma
con el postrer suspiro! Mas vive la Fuerza y rige el Compás:
“Di-os, Di-os, Di-os, Di-os!”
Cantan marchando y marchan cantando el arroyo, el río:
“Di-os, Di-os, Di-os!”
¡Ay, si fallara el ritmo! Desde la montaña hasta la agreste costa
multitud de peces moriría y llorarían los molinos,
barcos y bateles… Mas vive la Fuerza y rige el Compás:
“Di-os, Di-os, Di-os, Di-os!”
En una ardiente carroza viene el Sol, se va la Luna, se va el Sol, viene la
_____________________________________________/ Luna:
“Di-os, Di-os, no-che, dí-a!” ¡Trescientas sesenta y cinco veces!
¡Ay, si fallara el ritmo! No habría luz,
no habría flores ni arco iris multicolor, ¡sólo la Tierra errante,
un gigantesco ataúd! Mas vive la Fuerza y rige el Compás:
“Di-os, Di-os, Di-os, Di-os!”
Marchan refulgentes los astros y sistemas solares:
“¡Di-os, Di-os, año-de-luz, siglo-de-luz, edades estelares!”
¡Ay, si fallara el ritmo! Mas vive la Fuerza y rige el Compás
y late y palpita y arde y se fermenta el tiempo en el Huevo.
La cáscara del Huevo: la Eternidad,
que reposa en la Mano en que Dios la sostiene...
miércoles, 9 de septiembre de 2009
Creación y evolución (segundas y más graves divagaciones)
Quien tiene la libertad para hacerlo es precisamente porque tiene eso, libertad, esa característica distintiva que la materia, incluso seres con vida, no tienen.