Medallón y rastra, un chapiao de estrellas,
vestía la rosa del viejo jardín.
Violín y bombo, con flauta y guitarra,
los cielos me daban, las noches de abril.*
vestía la rosa del viejo jardín.
Violín y bombo, con flauta y guitarra,
los cielos me daban, las noches de abril.*
Será por eso de que para el lunfardo un "abril" más es un "año" más. Será por eso que a modo de año nuevo (pero bien a tono cuaresmal) aprovecho que llega abril para hacer unas confesiones. Diré dos cosas que me hacen ser un mal bloguero:
1) A veces alguien me hace un comentario. Lo leo, me parece bueno, acertado, lo guardo muy interesado pero chau, no digo nada. No respondo. Mientras que si yo hago algun comentario en otro blog siempre me gusta si me responden, para qué negarlo.
2) Entusiasmado he dejado, a veces, en un comentario, simplemente un link a un post mío. Al instante me disgusto con lo que hice. No es de buen gusto. Es preferible, si voy a dejar el link, tomarme el trabajo de reescribir un poco mi idea y aportar algo ahí mismo. (Hace poco alguien notó lo malo de esta actitud).
El problema de los comentarios en los blogs es que es dificil enterarse cuando te contestan.
ResponderBorrarPor mi parte de debo algunas respuestas. No las prometo, pero lo intentaré.
Yo tampoco prometo responder... bah, yo debería hacerme propósito, ya que hice confesión.
ResponderBorrarEso sí, me gustan pocas palabras. A veces no hace falta una respuesta, seamos sinceros.
Es verdad que es difícil ir para atrás en lso comentarios, es bueno tu sistema de mostrarlos al costado.
Veo que empezaste bien, contestando a tu primer comentarista de este post. Ja,ja!
ResponderBorrarEs un tema jodido, tal vez la clave esté en hacer algunos post sin comentarios, como para enfocar en los comentarios "importantes".
ResponderBorrarEspero que contestes este comentario.
Debo decir que no entiendo la propuesta...
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