martes, 26 de septiembre de 2017

The Land Beyond the Land of the People

"The main feature of the Alert crest is the head of a muskox, a suitably northern animal. Behind the muskox is a background of black and yellow, signifying the periods of total darkness and total sunlight experienced at Alert. Below are two peaks denoting the two mountains to the south, Crystal Mountain and Mount Pullen, between which the sun rises in March. Behind them are the white peaks of the Western Mountains. Below the peaks, a blue band between two white wavy lines signifies the Lincoln Sea and the water and ice pack surrounding Ellesmere Island. The crest is encircled by a wreath of gold maple leaves and with the royal crown of Queen Elizabeth II, Sovereign of Canada, on top. On a banner below the crest is the motto 'Inuit Nunangata Ungata' which translates in English to 'The Land Beyond the Land of the People', the age old and very apt Inuit description of Canada's northern Arctic region". [*]

La cosa es tan fantástica como real. De tan raro suena como esas antiguas historias de ficción, de reinos lejanos y perdidos. Pero el lugar es Alert, en Nunavut, Canadá. Ya lo presentamos en la primera entrega de Alter Mundi: el lugar permanentemente habitado más septentrional, más cercano al polo norte. Nació como una estación de radio y comunicaciones. Es base militar y tiene aeropuerto y estación meteorológica. CFS (Canadian Forces Station) Alert. Y ese es su blasón.

Lean cosas muy interesantes sobre Alert en esta página. ¿En cual? En ésta.

[*] La principal característica del blasón de Alert es la cabeza del buey almizclero, un animal muy propio del norte. Detrás del buey almizclero hay un fondo en negro y amarillo, que refiere a los períodos de total oscuridad y total luz solar que se viven en Alert. Abajo hay dos cumbres que representan las dos montañas del sur, la montaña Crystal y el monte Pullen, entre los cuales el sol sale en marzo. Detrás de ellos están las cumbres blancas de las Western Mountains (Montañas del Oeste). Debajo de las cumbres, una banda azul entre dos líneas onduladas significa el Mar de Lincoln y el hielo que rodea la Isla de Ellesmere. El blasón está rodeado por una corona de hojas doradas de arce y la corona real de la Reina Elizabeth II, soberana de Canadá, en la parte superior. En un estandarte debajo del blasón está el lema "Inuit Nunangata Ungata", que se traduce al inglés como "The Land Beyond the Land of the People” (La tierra más allá de la Tierra de la Gente), la antigua descripción inuit de la región ártica del norte de Canadá.

martes, 19 de septiembre de 2017

Metiéndome en el mundo de Faulkner (relato con algún excurso espiritual)

Al momento solo leí un libro de William Faulkner. Pero tiene el privilegio de ser el libro que más rápido volví a leer. Y no he releído muchos libros. A relectura completa, me refiero. Si leo de qué se trata el resto de las obras de Faulkner me asusto un poco. Hay menciones de sexo y violencia y situaciones seguramente nada “edificantes”. Si vemos su vida personal, tampoco lo es (aunque dicen que fue muy profesional en su trabajo de escritor). Pero, ¿puedo fiarme de “Los Invictos” (la única obra que leí) para pensar que el tratamiento que hace de temas escabrosos no es tan cruel e innecesariamente despiadado como en películas de televisión o textos más modernos? Porque la verdad es que la historia de “Los Invictos” es dura, difícil, tanto la de sus personajes principales como las de la masa indeterminada de los negros, esos negros emancipados que recorren como zombies los caminos hasta su Jordán, pero no es innecesariamente cruenta ni repugnante en su descripción. Y hasta es heroica.

Quizás le falta a Faulkner una visión de fe. Por eso no entiende cómo los negros pueden, como otros pueblos, peregrinar hacia una especie de tierra prometida. Pero, ¿es la fe de esos negros una fe conveniente? La visión de Faulkner es “la otra historia”, la distinta a la oficial. Critica cómo los negros fueron dejados de lado o usados por quienes los liberaban. Pero, para ellos, ¿los que los liberaban eran los yanquis por ellos mismos o como medios de un Dios? Y ese Dios, ¿era un auténtico Dios? La religión esa era protestante. Metodistas, episcopalistas... ¿Hizo bien esa religión o los negros fueron engañados?

El fin de la esclavitud es un objetivo necesario para la humanidad. Y si Faulkner recibió el premio Nobel fue, además de por sus frutos literarios, gracias al alegato antirracista “Intruso en el polvo” (según dice el doctor Antonio Ballesteros González). Pero así y todo Faulkner parece decirnos que los negros (al menos muchos, al menos aquellos que vemos en sus personajes) estaban mejor en sus vidas de esclavos que luego en sus vidas libres. Esto no es una defensa de la esclavitud, no podría serlo. Tiene que ser entonces una crítica a los yanquis (y quizás a la religión de los negros, aunque al momento no me queda claro).

Al momento solo leí un libro de William Faulkner, dije. Y me gustó mucho. Y me fascina que haya todo un mundo, con su plano y su genealogía. Un mundo fantástico inmerso en una historia real como es la Guerra de Secesión y épocas cercanas. Un condado imaginario, en el estado de Mississippi, llamado Yoknapatawpha. Que se ubica aproximadamente en lo que sería un condado real llamado Lafayette. Y Faulkner describe todo tan bien. Y sus oraciones son largas y con muchos rodeos pero las cuenta tan bien que dan ganas de descifrarlas. Y los nombres que usa, y los títulos. Y la historia de “Los Invictos”, contada desde la perspectiva de un chico, está tan bien, con todas esas sensaciones que los chicos tienen y evocamos muy fácilmente si pensamos en nosotros. Y la abuela, gran personaje. Y esas cosas como eran antes. El respeto a la mujer o a los mayores. El trabajo de la conciencia sobre los propios actos. Y el pedir perdón a Dios.

Hoy nadie cree en Dios. ¿A quién le van a pedir perdón entonces? ¿Quién guía tu vida? Vivimos como si supiéramos todo y buscamos dioses en reikis, budas, ecologías, pueblos originarios, comida sana y natural, vegetarianismo, veganismo, respeto, tolerancia, pluralismo. Todo eso está muy bien pero ocupa, sin llenarlo, el lugar del Dios que seguimos buscando sin saberlo, que no nos dimos cuenta que rechazamos. ¿Con quien te reconciliás cuando te “reconciliás con la naturaleza”? Si vos sos naturaleza, y la naturaleza no es más que alguien parecido a vos. ¿Con quién estás hablando? ¿Quién te puede absolver o salvar? La calma, el darte cuenta que fluís con el universo… ¿a quién satisface eso? Yo quiero ver siempre los ojos que quiero. Quiero sentirme en familia por toda la eternidad. Yo sé que si existimos es por algo. Simplemente porque puedo pensar en que es por algo, es que por algo debe ser. Un día me dormiré para ver qué hay, cuál es el fin de la película.

Mientras tanto sigo con “Los Invictos” de Faulkner. Y los mapas de Yoknapatawpha, hechos por el mismo Faulkner. ¡Y la Yoknapedia! Para averiguar sobre todos esos nombres que usa Faulkner como Vendée, Riposte in tertio, etc. Aunque debo decir que mi edición de “Los Invictos” tiene buenas notas (EDAF, 2011). Y también debo decir que no miren mucho los mapas porque pueden “botonearle” algunos sucesos de obras que aún no leyeron (spoiler alert, como dice el gaucho). A continuación, una cita de Faulkner que usa el emprendimiento Yoknapedia cuando presenta el sitio:

By all means let us make a Golden Book of my apocryphal county. I have thought of spending my old age doing something of that nature: an alphabetical, rambling genealogy of the people, father to son to son”.
William Faulkner, letter to Malcolm Cowley, The Faulkner-Cowley File, p. 25.

Faulkner falleció en 1962 a los 65 años y no sé si habrá podido cumplir con ese sueño. ¡Pero sí que era un genial plan de retiro!

sábado, 9 de septiembre de 2017

Giving directions


Llegás a Tigre, pasás el puente, seguís derecho por el bulevar de las palmeras (San Martín) hasta el semáforo. Si seguís derecho cruzás el puente y estás en Rincón de Milberg. En 4 cuadras llegás a la Santa María (semáforo) y doblás a la derecha. Le metés por esa. (¿Cómo se diría “métele derecho por esa” en las clases de inglés de giving directions?). Se hace ancha. Cruzás el canal. Llegás al los barrios Santa María de Tigre y Altamira y al centro comercial del Nordelta. Después de una Shell (mano de enfrente) y un distribuidor en que seguís derecho, la ruta hace curva a la izquierda. Contracurva a la derecha. Seguís hasta el final (unos 1000 metros). Rotonda, a la derecha. Seguís el camino que luego cambia de sentido girando a la izquierda y al final llegás al ACA de Dique Luján. Curva a la izquierda y contracurva a la derecha. Vista de campo la derecha. De barrio privado a la izquierda. Curva otra vez a la izquierda (lleva solo). Y en 400 metros curva a la derecha con cartel que indica Bienvenido a Villa La Ñata.

Avanzás entre chalecitos y quintas. En 1000 metros llegás al puente sobre el canal Villanueva. Si no lo cruzás y doblás la izquierda recorrés la costanera. Pero si doblas una antes (a la izquierda también) y hacés una cuadra, encontrás en una esquina el puesto de la foto. Hacen churros en el momento. Calentitos. Buenísimo.