sábado, 28 de noviembre de 2009

¿Prejuicio o indicio?

Hay que oír cómo se habla hoy en día de uniones homosexuales, del nuevo eufemismo llamado género y temas asociados.
Nadie confía en su primera impresión. Esa que le dice que hay algo extraño (y no por poco visto), algo que choca, algo que ofende el sano pudor. Y nadie trabaja a partir de allí con razonamientos elaborados. No, todo lo contrario, se prefiere pensar en esas impresiones como prejuicios, como “condicionamientos culturales”, etc. ¡Qué poca confianza en la capacidad para percibir bien y mal! ¡Qué poca confianza en uno mismo!
Quien diría, ¿no? Una sociedad que ya no habla de bien o mal, sino de sentimientos, de que si me siento bien o mal haciendo tal o cual cosa; esa misma sociedad aquí, justo aquí, no se fija en sentimientos, en las impresiones que le causan ciertas cosas. Se niegan, se rechazan, en pos de un supuesto progresismo mental.
¿Por qué mi objeción ha de nacer siempre de un prejuicio, y no puede ser un indicio de que algo está mal?

7 comentarios:

Fernando dijo...

Hola, Juan Ignacio. Soy experto en lo que apuntás, porque vivo en España. Espero que los obispos argentinos hablen de vez en cuando con los obispos españoles, para que estos les aclaren lo que os espera, si no estáis listos. Sólo quiero decir dos cosas:

1- A la gente normal se le gana con los sentimientos, con historias dulces, pues si no hay unas ideas fuertes sobre lo bueno y lo malo, todo se guía por un sentimentalismo sabiamente manipulado. ¿Querés un ejemplo? Nombrar Argentina del Año a un transexual y contar luego su triste vida incomprendida.

2- Creeme, por la experiencia española: esas ideas fuertes sólo se tienen dentro de la Iglesia, sector conservador. Puede parecer que no, que hay gente atea con ideas claras, pero el paso del tiempo las va erosionando, si no tenés el Catecismo cerca.

Juan Ignacio dijo...

Es muy fácil cambiar de opinión como de pantalón sino se basa el pensamiento en valores absolutos; todos pueden acceder a ellos.

(Espero que el suceso que mencionaste no se haga costumbre y llegue al concurso de Miss Argentina).

Con todo respeto y sin sentimentalismos.

Fernando dijo...

(JI, me preocupé por tu silencio)

Juan Ignacio dijo...

Obra en casa y vida social mayor a lo acostumbrado.

Como siempre, en Adviento en vez de dedicarnos a la contemplación nos dedicamos a las carreras...

Anónimo dijo...

HOla, soy Ademir de Perú, te animo a seguir publicando estas cosas.+
POr favor, mi blog es para que la gente se entere mas sobre este año y que eleven sus oraciones por la santidad del Sacerdote. Puedes ayudarme a promoverlo?
Saludos y Dios te bendiga

AleMamá dijo...

En Chile, con lo de las elecciones es todo un tema. TODOS se han hecho parte y los han mostrado como de lo más normal.

hna. josefina dijo...

Muy buena tu entrada. Hace bastante que -no sé por qué, pienso que por apuro- no pasaba.
¡Saludos!