jueves, 9 de octubre de 2008

Universales

Las tragedias griegas son universales por sus temas. Las películas norteamericanas son universales por su difusión.
O...
Los problemas de los antiguos griegos eran y son “más universales” que los de los norteamericanos, pero los que hacen las películas hoy son los norteamericanos.
Pero...
Hoy en día se pueden llevar las tragedias griegas a cualquier lugar del mundo y, sin embargo, por alguna razón, pareciera que la gente ve más películas norteamericanas que lo que lee tragedias griegas.
Me inclino a pensar que más que a un acierto de las películas norteamericanas (que las hay de todo tipo y valor) se trata de la menor necesidad de esfuerzo físico e intelectual que se necesita para ver una película norteamericana que para sentarse a leer una tragedia griega.

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Tambien, en estos tiempos en que todo se hace a las apuradas, es mas rapido ver una película que leer un libro.

Aunque nunca una película va a suplantar el disfrutar del libro.

Me ha pasado con la pelicula "Blindness". Cuando vi por primera vez el trailer y vi que estaba basado en un libro de Saramago "Ensayo sobre la ceguera", preferi leer primero el libro y despues vere la película.

Juan Ignacio dijo...

De acuerdo.

Además yo generalicé mucho, vos allá sabrás que no todo es lo noteamericano comercial que llega acá y que hay otras cosas mejores que acá quizás no llegan.

Fernando dijo...

Querido Juan Ignacio:

Valió la pena la espera.

Quisiera comentar 2 cosas. Como dijo el Rey al Conejo Blanco, comienzo por el comienzo.

No creo que sea elitista distinguir dos públicos: el culto y el no tan culto. Habría así unos gustos universales, pero distintos para cada uno de estos dos públicos. Cualquier hombre culto actual, griego, japonés, argentino, aprecia una tragedia griega, una comedia de Shakespeare o el Quijote. Cualquier hombre no tan culto actual, griego, japonés, argentino, aprecia una buena película de acción USA.

Así pues, hay dos universalidades distintas: ambas universales, pero distintas por su público y por su objeto.

¿Por qué? Porque todos buscamos, en lo que vemos, que esa obra se identifique con nosotros. El hombre culto enamorado quiere una obra de arte que refleje bien su enamoramiento, y sabe que puede acudir a Romeo y Julieta. El hombre no tan culto sabe que encontrará eso mismo en una amable película de Julia Roberts.

El hombre culto triste por el paso del tiempo y la muerte leerá las páginas finales del Quijote, y se pondrá a llorar. El hombre no tan culto, triste por eso mismo, verá un dramón otoñal de Barbra Streissand, y le ocurrirá esto mismo.

((Qué largo. Otro día continuo con la continuación: por qué nos gustan las pelis USA)))

Anónimo dijo...

Juani

La generalizacion no esta mal..Realmente la mayoria de las peliculas estadounidenses lo unico que hacen es entretener, no tienen mensajes y son descartables.

Y tampoco voy a negar que tambien he disfrutado de esas peliculas, pero creo que ese tipo de cine no va a reemplazar nunca un libro.

Es solo cuestion de tiempo libro.

Juan Ignacio dijo...

Algún mensaje tienen las películas norteamericanas por lo general. Pero aunque el mensaje está, muchas veces no es tan profundo el análisis.

En tren de confesar nuestros gustos por algunas de ellas yo podría dejar aquí varias... Pero lo mío no es muy elevado: me gustan aquellas películas de antaño como Volver al futuro, Karate Kid, con su porcioncita de mensaje verdadero y su abundancia de mensajes secundarios que considero errados. Y sin duda me quedó el gusto por verlas de chico (eso es lo que tienen los norteamericanos: a cosas que acá consideramos de chicos, en el buen sentido, allá le dan un tratamiento de alto pensamiento; no que los chicos muchas veces no lo sepan mejor o lo digan mejor, pero no es el caso).

Anónimo dijo...

Lamento contradecir a Fernando, pero creo que una persona culta puede tranquilamente ver una pelicula de accion de Estados Unidos.

Yo soy un tipo culto y disfruto tanto de un muy buen libro como una de pelicula de accion.

La diferencia esta en que una sirve para entretener y la otra para entretener y la otra para entretener y pensar.

Las cosas no se dividen o categorizan tan acertadamente.

Creo que en gustos es muy dificil poder categorizar a la gente y hasta me parece cuasi discriminatorio.

Anónimo dijo...

Querido Julián:

Confieso dos cosas:

1- Nunca he leído una obra de teatro griego, no sé citar casi ningún título.

2- Me encanta el cine USA (desde luego, 100 veces más que el español).

Así que, según mis propias categorías, estoy más cerca del hombre "menos culto" que del hombre "culto", lo que me da mucha autoridad para hablar de los gustos del primero.

No he acabado de dar vueltas a la cuestión pendiente en mi comentario anterior: ¿por qué nos gusta tanto el cine USA?, aunque ya lo tengo esbozado.

Anónimo dijo...

Fernando,

Estuve releyendo mi comentario y creo que pudo tomarse agresivo, asi que si fue asi pido mil disculpas. No fue mi intencion.

La idea que tengo de las peliculas de accion de USA creo que sirven para entretener, como escape, nada mas.

Creo que esas peliculas llevan a escaparse y entrar a un mundo fantasioso, que muchas veces es violento y quizas sea eso lo que mas atraiga.

Quizas sirva para satisfacer esa parte animal que tiene el ser humano por la violencia. No lo se.

Anónimo dijo...

Querido Julián:

¡¡Ya sé que escribiste tu comentario anterior con buena intención, y que si escribes en el blog de Juan Ignacio tienes que ser una buena persona!!!

Simplemente, quise aclarar que la distinción que hice entre "cultos" y "menos cultos" (que, en el tema que planteaba Juan Ignacio, me parece crucial) no la hacía porque yo me considerara dentro del primer grupo y despreciara a los del segundo. ¡¡¡Nada de eso!!!

Un saludo, y escribe más en tu blog.

Anónimo dijo...

Querido Juan Ignacio:

Continuo por la continuación.

El cine USA nos gusta, ante todo, porque es un producto comercial bien hecho. Es como un coche o un ordenador, muy trabajados para que valgan a la mayor cantidad posible de consumidores, en todo el mundo. El cine francés será muy bueno para los franceses, el español para los españoles, pero al igual que ciertos vinos o que ciertos quesos, si te los llevas lejos de su sitio de fabricación empiezan a alterar el sabor.

Además de ser un producto comercial, es un producto hecho con muchos medios. Fui a ver, hace no mucho, la continuación de Batman. El despliegue de coches, bombas, carreras, vuelos y rascacielos, que son cosas que gustan a cualquiera, era impresionante, fascinante, pero eso sólo se puede hacer con muchos dólares. Ninguna peli europea, por ejemplo, se puede permitir esos efectos especiales, o meter a muchas estrellas en la peli, u otros grandes gastos.

En fin, por lo que hablábamos al principio de llegar a muchos consumidores, las pelis USA saben tocar tu corazón, mucho mejor de lo que lo haría una peli de tu país. Cuando Ingrid Bergman mira a Humphrey Bogart en Casablanca, lo hace del modo en que uno querría que le mirase a él su novia. Cuando el actor alto cuyo nombre no recuerdo es humillado en Un hombre tranquilo uno siente ahí reflejadas, perfectamente, las veces en que a uno le han humillado. Cuando Escarlata O Hara hace un matrimonio de conveniencia en Casablanca, uno ve la veces en que ha tenido que tragar con cosas con las que no estaba de acuerdo, pero que eran útiles para lograr otros fines.

(Como no he leído a los griegos, no sé si estas 3 cosas se pueden decir de sus tragedias: creo que no)

Juan Ignacio dijo...

Ante todo me alegro que se hayan entendido mis dos comentaristas de esta entrada.

Muy interesante análisis, Fernando (gracias por el trabajo que te tomaste).

Las tragedias griegas, que habré visto en escena alguna y leido completas nada más que dos, de las cuales sólo recuerdo Antígona de Sófocles (la otra es Edipo Rey pero fue hace tanto...) pueden tocar el corazón igual o más que las películas norteamericanas. Hay escenas memorables en el cine norteamericano, pero también las hay en las tragedias griegas. Por supuesto en estas últimas la escenografía la pone uno.

En cuanto al tema de que las películas norteamericanas "están hechas para que valgan a la mayor cantidad posible de consumidores" es un punto clave. Y es la clave de su amplia difusión. Tocan temas que atañen a todos porque la más de las veces apelan a algo primitivo o básico del ser humano. Pero eso no implica que luego le den un tratamiento profundo al tema.