viernes, 21 de marzo de 2008

(Viernes Santo)

Una persona es algo valiosísimo. Olvidarte de un amigo o incluso (o más aún) de aquel que podría haberlo sido, es una falta cuya gravedad no me animo a ver.
Estamos obligados a darnos totalmente.
(Viernes Santo entre paréntesis, porque pensé que esto no tenía mucho que ver, pero ahora que lo pienso... recuerdo a los que se olvidaron de Él, y también cómo Él se dio totalmente).

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo tengo olvidado, visítame y ve para que veas mi nuevo blog y claro: pa' que me incluyas en tu biblioteca!! Te tengo en goolereader por eso te leo siempre.

unabrazo de Pascua!!

hna. josefina dijo...

¡Y cuántas veces Le olvidamos nosotros!

Juan Ignacio dijo...

¡Por cierto, qué detalle que se me "olvidó", Josefina! Gracias.