jueves, 16 de septiembre de 2004

Me doy cuenta

Ayer. Tercer viaje en auto.
Tarareando sin conocerla, una canción que habla de creer en Dios.
Y al inventar frases para acompañar la música, digo con otras palabras lo que digo siempre en el Credo.
Y me doy cuenta de que creo.
"Eso es creer", me digo.
Pero también declaro para mis adentros que la razón es buena.
Que la razón inquieta y escudriñadora de los misterios divinos es buena.
Que la razón que está elaborando pensamientos en este momento que canto y viajo es buena.
La razón que me dice: te diste cuenta de que creías, eso de lo que te diste cuenta es de que creés.
Primero creo (y de eso me doy cuenta al cantar).
Luego es la razón la que enuncia: "eso es creer".
Creer no es acto de razón (al menos no pura razón, no soy teólogo pero entiendo así).
Pero darse cuenta que uno está creyendo, eso es más de la razón (¿o no?)
Y a continuación enunciar: "eso es creer" ("eso que experimenté es creer"), eso sí es razón.
¿O no?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una de las cosas que, según me han dicho, distingue a católicos de protestantes es que nos. estamos llamados a dar razones de nuestra fe...Creo que San Palo dice algo de eso. Lamentablemente los muy razonadores como nosotros, tenemos miedo a nuestra razón, porque nos hace desconfiar...pero no es un problema de razón, sino de fe, y la razón es nuestra, y la fe, que es don divino, no hace más que iluminarla para sacar todo su potencial.