miércoles, 19 de octubre de 2005

"A tono con Jesucristo"

De una entrevista en “ABC.es” (por “Mar adentro”) al cardenal chileno Francisco Javier Errázuriz Ossa, presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), referente al actual sínodo de obispos.

A la pregunta de si la Iglesia católica saldrá de este Sínodo «más a tono con el siglo XXI», el cardenal chileno respondió tranquilamente que «saldrá más a tono con Jesucristo, más consciente del misterio de amor que es la Eucaristía. Los padres sinodales comparten una pasión por entrar más en el misterio del altar, entrar en la acción de Dios, que se manifiesta en la vida personal de cada fiel»

Se podría suponer que en la pregunta hay tácita una afirmación, o una concepción. Imaginamos que el interviewer considera que “estar a tono con el siglo XXI” es algo completamente bueno.

Supongamos que el cardenal estuviera pensando en lo bueno del siglo XXI o interpretara el “estar a tono” como una “actualización”, en el buen y posible sentido, de la enseñanza de la Iglesia. Un “sí” como respuesta, en ese caso, podría tener lugar pero tendría un significado distinto para periodista y para obispo. El primero, entusiasmado, no tardaría en abordar cuestiones relacionadas con “el preservativo y el SIDA”, por citar un “tema de moda”. Y su decepción podría ser mayúscula.

Lo mismo si el prelado dijera: “no”, pensando que “estar más a tono con el siglo XXI” implica adoptar las cosas malas del siglo (que por lo general son las que la Iglesia pretende revelar y corregir, dando el mensaje de Jesucristo).

“Sí” o “no” responderían no sólo a una pregunta en su forma aparente sino que se afirmarían sobre algo que no se discutió antes, o sea, cuán bueno o malo es “estar más a tono con el siglo XXI”. Serían entonces respuestas inútiles.
Por eso a la respuesta que dio el cardenal me animaría a llamarla inspirada. Porque al faltar una discusión previa, responde con una verdad más grande y da pie a una nueva pregunta, para cuando se quiera tratar el tema subyacente. ¿Estar a tono con el siglo XXI es estar a tono con Jesucristo? Pues es lo segundo lo que compete a la Iglesia y al sínodo.

6 comentarios:

Eleder dijo...

¡Muy cierto! Muchas veces se dice "la Iglesia se queda atrás del mundo"... ¿y, si no sabemos hacia dónde está yendo el mundo, porque sin embargo se da por seguro que ir con él es bueno?

La referencia es otra, como has tan bien señalado. Y hacia ahí es hacia donde hay que avanzar.

Lilian dijo...

Excelente, muy inteligente tu comentario.

m dijo...

Alquien que no recuerdo quien es dijo algo asi como que la Iglesia debe dirigir una oreja hacia Dios y la otra hacia el mundo.

Carlos Bartolomé Santos dijo...

Algo asi como la respuesta de Jesucristo acerca del impuesto... muy inteligente.

Anónimo dijo...

No sé porqué, pero me ha recordado una cita de C.S Lewis, creo, y es que si vemos una puerta en medio de la aparente nada hay que averigüar por qué fue puesta ahí antes de derribarla. Acá igual. Se quiere destruír soluciones humanitarias probadas con éxito en la Iglesia siendo fiel a Jesucristo por modas que ya no lo serán en una generación. Pero, obvio, hay que ponerlo en moderno, con una "pedagogía moderna" como dice el autor Jacques Phillipe en sus 4 últimos best sellers de espiritualidad. ¿No los conocen? ¡Pues lo que se han perdido! ¡Corran y léanlo antes de que se agote! en dos años van como en la octava edición, en serio.

Juan Ignacio dijo...

Phillipe es de aquella comunidad:

http://dehoy.blogspot.com/2005/06/antiguos-caminos-nuevos-caminos.html