Sófocles (...). Nacido en los últimos años del siglo quinto antes de Cristo, murió nonagenario hacia el año 406.
miércoles, 30 de noviembre de 2005
¿Error?
Resquemor
martes, 29 de noviembre de 2005
Brotes
Sin embargo fue como un partido ganado a pura garra. Regamos y regamos hasta que salió. Por supuesto, la dirección técnica de mi suegro, encargado de elaborar el gajo, fue la clave.
¡No va que por estos días mi hermano se destapa con que va a tener un hijo! Andaban buscando y sorteando inconvenientes, pero al fin llegó. Como la rosa.
Damos gracias a Dios por esta bendición y pedimos que crezca sano adentro hasta que le toque salir.
lunes, 28 de noviembre de 2005
Adviento con el Papa
Día a día leemos noticias y noticias, estamos al tanto de lo que hace el presidente o tal ministro. Por otra parte, el tipo de noticias y el modo en que se ven y se comprenden es muy mundano. Por eso es una bendición tener la posibilidad de consultar diariamente periódicos o agencias de noticias católicas, con otra forma de ver las cosas y con las palabras de nuestro Papa y pastores.
Y como esta entrada ya esta muy vulgar, vamos a lo que vine. Adviento: qué dijo el Papa. Cosas muy simples, pero muy importantes. Sigo la línea del artículo de Zenit (27.11): “Adviento, tiempo para volver a esperar en la renovación del mundo: asegura el Papa”.
(...) cada vez que la comunidad cristiana se prepara para hacer memoria del nacimiento del Redentor, experimenta en sí un escalofrío de alegría, que se comunica, en cierta medida, a toda la sociedad.“¡Escalofrío de alegría!”. ¡Sin igual! Me gustaría conocer el original, pero no dudo que sea literal la traducción, por ser tan “originales” las palabras.
En Adviento --aclaró--, el pueblo cristiano revive un doble movimiento del espíritu: por una parte, levanta la mirada hacia la meta final de su peregrinación en la historia, que es el regreso glorioso del Señor Jesús; por otra, recordando con emoción su nacimiento en Belén, se agacha ante el Nacimiento.Contagiado por lecturas “castellaninas”, es una alegría escuchar hablar de la segunda venida, tema tan poco de moda.
(...) los cristianos tienen que despertar en su corazón la esperanza de poder, con la ayuda de Dios, renovar el mundo.Toda una utopía hasta para algunos que nos consideramos cristianos. Pero no lo seremos tanto si es que pensamos que no podemos desear y pedir a Dios eso, si es que pensamos que eso es imposible. Como decía Santa Teresa de Ávila:
(...) es harto daño no creer que Dios es poderoso para hacer obras que no entienden nuestros entendimientos.De las Moradas sextas, capítulo tres; alguna vez lo traje aquí.
domingo, 27 de noviembre de 2005
Adviento (semana primera)
sábado, 26 de noviembre de 2005
Yo quiero ser...
los que, como la acacia y el alerce
viven despacio en un crecer de invierno
sin más quehacer ni lucro que un eterno
a sí mismos hacerse
los de palabra parca, más bien dura
cuyo silencio, cauto a la caterva
esconde pudorosa la reserva
de una inmensa ternura
Yo quisiera ser un sembrador
de fe y de gozo...
Nada más que eso;
yo no soy sermonero ni filósofo...
¿Y qué puedo enseñar si no sé nada
de lo único que adoro?
...
jueves, 24 de noviembre de 2005
Hipótesis e ilustración
(...) en virtud de aquel "humorismo angélico" (...) también la sátira puede ser una forma de la caridad, si se dirije a los humanos con la sonrisa que tal vez los ángeles esbozan ante la locura de los hombres.
Hoy vi a un señor como de 60 años, con los ojos cristalinos, unos ojos que contenían toda la paciencia del mundo y toda la bondad. En realidad era su rostro completo el que expresaba todo esto, pero sus ojos no tenían comparación, eran tan compasivos que casi me hicieron llorar, porque se compadecían de mí; de miserias y angustias que hoy pasé, de dudas y penas que hoy me estremecieron profundamente. Y pensé, así quiero tener yo los ojos cuando sea grande; y él, sin reírse, se rió de mí, pues voy exactamente por el camino opuesto de aquél que me llevaría a morir en paz así, con unos ojos así.
miércoles, 23 de noviembre de 2005
Como soy un poco triste...
Como soy un poco triste
siento la necesidad
de hacer uno que otro chiste
basado en la realidad...
martes, 22 de noviembre de 2005
Convalecencia
domingo, 20 de noviembre de 2005
Ciudad (divagues)
Mi ciudad tiene el encanto de los escritores bohemios en los bares del centro, tiene el misterio del subte que aparece y desaparece bajo tierra, tiene muchas cosas más. Tiene algo de inhumano, pero el hombre es capaz de humanizar hasta la ciudad.
Él hizo la ciudad. La ciudad es "libre" y puede decidir lo que hace. El ciudadano no puede modificarla. Sabe que así libre (o, digamos, así en la posibilidad de su libre albedrío) es autora de los más bajos actos. Pero la ama igual. Y le da la libertad para que algún día vuelva a él, al hombre.
Claro, para eso deberá negarse a ella misma.
viernes, 18 de noviembre de 2005
Costumbres vivas
miércoles, 16 de noviembre de 2005
Pseudoversos sobre incidentes nocturnos
y las mato cuando me animo.
Pero esta vez... la vi de lejos,
pasaba lo más oronda y rapidito
a plena luz y hacia el lugar que yo más quiero
(porque allí entonces estaban ellos).
Señalé el libro y salí a su encuentro;
sabía que tenía poco tiempo.
Saqué alguna prehistórica fuerza
de hombre defendiendo a su familia
de las furias de la naturaleza.
Y con el tradicional “chancletazo”
di final a su vida
en el umbral de la pieza.
Y que me perdonen los ecologistas...
(este asunto tiene muchas aristas).
Cruzando textos
En su mensaje dice el Papa:
Quisiera una vez más confirmar que la Iglesia, en Italia y en todo país, al igual que en las diferentes instituciones internacionales, no pretende reivindicar para sí ningún privilegio, sino sólo tener la posibilidad de cumplir la propia misión en el respeto de la legítima laicidad del Estado.
Al referirse el Pontífice a la riqueza de la cohesión interna de Italia, escribe:
Esta unión presupone un centro, un núcleo que dé significado y valor, en torno al cual puedan converger las diferentes posiciones ideológicas y políticas. Este centro sólo puede ser la persona humana, con los valores inherentes a su dignidad individual y social, que la Iglesia, por mandato de Cristo, desea servir ardientemente.
“(...) El problema de fondo es que una sociedad democrática es necesariamente una sociedad laica, porque se funda sobre la voluntad del pueblo y luego sobre ciertos valores que también son promovidos por la Iglesia. La sociedad islámica, en cambio, es teocrática porque está fundada sobre el principio de la voluntad de Dios. Por eso la integración es difícil: si manda la voluntad de Dios no manda la voluntad del pueblo, y viceversa”.
Además, decir “y luego sobre ciertos valores... que también son promovidos por la Iglesia” puede parecer correcto. Pero podría insinuar la afirmación de la llamada “ética laica”, ya que no dice de dónde surgen esos valores. Y hasta podría parecer que el Papa coincide, cuando propone “el respeto a la legítima laicidad del estado”. Pero no es así.*
Benedicto XVI no está olvidando de dónde surgen los valores mencionados, no está olvidando a Dios como fuente de la dignidad del ser humano. Imagino que, entre tantas otras cosas, el Papa lleva arraigada la confianza en el hombre, y en su capacidad de llegar a la verdad por la razón (esa de la que nos hablaba Juan Pablo II en “Fides et ratio”). Por eso habla así a los políticos.
martes, 15 de noviembre de 2005
Algo acerca de las promesas
Si una promesa es para siempre, sólo la habré cumplido si nunca la dejé de cumplir. Si alguna vez no la cumplí, el “juicio final” será que no cumplí la promesa.
En inglés dicen: “keep a promise”. “Guardar una promesa”, traducen algunos. “Mantenerla”, se me ocurre, usando ese keep.
Así visto, en castellano estaríamos poniendo énfasis en el final, en el cumplimiento de la promesa, mientras que en inglés se estaría destacando el transcurso, la característica del "promesante" en camino hacia el cumplimiento final.
Pero claro, las promesas para toda la vida son promesas que se cumplen continuamente, porque se vive siendo fiel a las mismas (frente a posibilidades de no serlo). Se vive cumpliendo las promesas. Y de esa forma, ambas expresiones (en castellano y en inglés) son semejantes. ¡Bah!, yo digo.
Sé que algo (o mucho) se me debe estar escapando por atrás de todo esto. Pero vaya lo que fue, por ahora, para empezar.
Posdata: por ejemplo, hay promesas que se deben cumplir continuamente y hay promesas que se cumplen en un determinado momento (prometo ser buena persona, primer tipo; prometo ir hoy a tal lugar, segundo tipo). Quizás otra diferencia no sea el "tiempo de vigencia" de la promesa sino las oportunidades en que se prueba la fidelidad a la promesa. Está también la forma de enunciarlas, afirmativa o negativamente. Etcétera. No prometo seguir con este tema.
* Todo surgió al leer el slogan de una firma que vende maquinas para depósitos: “[Máquinas X], because you have promises to keep”.
A falta de punto final, un paréntesis
sábado, 12 de noviembre de 2005
Una pregunta
JOSÉ LUNA: (...) Los ojos de Lucía Febrero se abren al mundo como dos preguntas verdes. Y su corazón también es una pregunta.
FILOMENA: ¿Verde?
JOSÉ LUNA: (Turbado). Sin color, Filomena. Pero más terrible que las otras. Esa es una pregunta que hace llorar.
LEONE: (A García, por José Luna). ¡García, está delirando!
GARCÍA: ¡Es la lujuria que se le metió en los ríñones!
JOSÉ LUNA: (A Filomena, patético). ¡Filomena, no me digas que no has entendido!
FILOMENA: No entiendo nada, José.
JOSÉ LUNA: (A Cantabelli). Y usted, ¿lo entendió?
CANTABELLI: Naturalmente. Lucía Febrero es una pregunta viva; lo ha sido eternamente.
JOSÉ LUNA: ¡Gracias, Cantabelli! Usted es un hombre. ¿Y si nos tuteáramos?
CANTABELLI: José, todavía no.
JOSÉ LUNA: (A todos). ¡Oigan! El señor Cantabelli ha dado en la tecla: Lucía Febrero es una pregunta urgente.
Pero aún cuando no exageres
la verdad es que no eres
con veinticinco alfileres
nada más que una pulguita
y eres ya una mujercita
y una pregunta infinita
como todas la mujeres.
viernes, 11 de noviembre de 2005
Desengaño de París
París no es para todos los hombres el paraíso de la tierra; no lo creáis así, aun cuando lo repitan sin cansarse aquellos que en París han vivido y saboreado los encantos de una vida activa, donde los placeres del espíritu disputan las horas, que aquí son cortas, a los placeres del sensualismo que trasmite y absorbe las impresiones del ser humano.No; el paraíso de cada hombre está en la tierra natal; y si ella le falta, y si ella está lejos, ese paraíso lo encuentra en los recuerdos de esta tierra querida y tan sólo en aquellas horas de profunda reconcentración en que el espíritu viaja, atraviesa los mares, recuenta los tiempos, los hombres y las cosas, y por el sentimiento del amor más puro vive en una idealidad que no es dable describir; pero que se siente, que existe para cada hombre, y que sólo puede nacer del amor a la tierra patria. Yo he sentido esas horas.
jueves, 10 de noviembre de 2005
Buscando la forma cristiana
Pero hay algo que definir respecto a la “obligación”. Ayudar a los demás “porque hay que ayudar” es una cosa inútil y mala para el que lo hace. Es cuestión de rescatar el buen sentido de la obligación. Aquella persona que sabe que ayudar es bueno, pero se conoce débil y tentado a no hacerlo, toma a la obligación como una ayuda en su libertad. “Sé que es bueno ayudar, por eso me someto a la obligación de hacerlo”, que es obligación para mis impulsos malos, mas no obligación para mi voluntad libre (¿se puede decir así?).
En ese aspecto, la caridad “sí se obliga”. Por algo Dios dejó “mandamientos”. (Ver luego qué interesante este artículo de “Video meliora...”, al que llegue por “Compostela”, en donde muestra como el hombre perdió el sentido de la obligación).
¿Y sin Dios? ¡Ah! Sin Dios es otro tema. Y otro post. (Algo de eso dejó estos días “Mar adentro”). Empecemos por donde empecé: “La Doctrina Social de la Iglesia dice...”. Aunque anticipemos que “sin Dios” sería lo mismo que “sin escuchar a Dios”. Sin Dios la ética es “laica” (no muy feliz término) y como tal podría llegar muy lejos (en cuanto a la razón descubriendo la verdad), pero creo que podría llegar un punto en que la ética laica no encontrara razones para obligarme respecto a mi prójimo. Y entonces no me sentiría obligado. Y entonces, en la primera de cambio, todo se derrumbaría.
Por lo tanto, si en el aspecto individual la caridad necesita de alguien que nos guíe mediante “obligaciones”, ¿cuánto más no se necesitarán esas guías en una sociedad?
Ese “en función social” de la Doctrina Social de la Iglesia debe tener alguna forma de instrumentarse. Recuerdo algún ejemplo de un profesor. Si tuviera yo varias propiedades y una de ellas no la uso ni la exploto, debería dar la posibilidad de que alguien la use o explote... (era algo así).
Esto no es “quitar al que más tiene para dar al que menos tiene”, como un señor opinaba hoy en “La Nación”. Esa es una frase muy agresiva (¿soy muy delicado?). Digamos que es más propia de un Robin Hood. Encima el título del artículo decía que el presidente debe “democratizar la riqueza”. ¡Pobre riqueza! ¡’Ta bien que es engañera! ¡Pero no hay derecho a desearle eso!
Si pensamos en leyes que “obliguen”, vamos a entrar en otro terreno difícil (al menos para mí). Pero pienso, ¿es preciso pensar en leyes de “expropiación”? ¿No hay otras formas de implementar la función social de la propiedad privada?
Va a sonar muy trillado en su forma de decir, pero necesitamos gente creativa (gobernantes, políticos) que se preocupen por el pobre sin llegar a los extremos marxistas y liberales. ¡Es difícil! Es difícil que, indignados ante la injusticia, no queramos a veces “ajustar cuentas” drásticamente. Como es también a veces muy difícil reconocer que siempre tenemos obligación con el necesitado.
Ahí les va el cierre optimista. Quizás esa famosa teoría del péndulo refleje lo que está pasando en Argentina (¡uh, viejo, que gastado eso!). Quizás oscilamos mucho de izquierda a derecha y ahora las oscilaciones son menores, quizás tengamos versiones menos extremistas de lo mismo que hubo antes (¿les cierra?). Siguiendo este camino quizás lleguemos a un punto intermedio (hmm...).
¡Pst, ya sé, con eso no alcanzaría! De nada serviría, e incluso quizás nunca suceda, si no es el hombre el que se mueve. Y le convendría un movimiento “ascendente”.
Posdata: los lectores sabrán que no descubrí la pólvora así que les pido perdón por hablar en voz alta de estos temas (y por alguna que otra teoría que me salió medio zoncita). Mi profesor de Doctrina Social de la Iglesia me perdonará por no recordar nada.
martes, 8 de noviembre de 2005
Panza Verde
Parece ser muy común que a los entrerrianos se les diga “panza verde” y algunos dicen que es por tomar mucho mate. Pero quizás no es por eso. Hay quien cuenta que “esta famosa versión de llamar "panza verde" a los entrerrianos, no es por el mate sino por que en la época de la guerrilla, como la indumentaria de los soldados era blanca les quedaba la panza verde al tirarse al pasto”.
Algo como eso defienden otros: "(...) Francisco Pancho Ramírez no traicionaba porque era hombre de honor y no creció a la sombra de nadie, ¿ si no fuera hombre de honor, habría muerto por su mujer ? por algo los llaman "Panza verde" por correr por abajo de los alambrados".
En otro lado precisan: "Es sabido que Entre Ríos es una de las provincias argentinas que marchan a la vanguardia en el consumo de yerba mate. Cada habitante consume por año entre 7 y 8 kilogramos de yerba, costumbre que les ha valido a los nativos el apodo de "panza verde" -aunque hay otras versiones que lo atribuyen a las pecheras blancas de los soldados de Pancho Ramírez, que tomaban el color de los pastos, cuando aquellos se arrastraban".
Al parecer hay panzas verde (¿o panzaverdes?) en otros lugares, como en México. También he leído que se llamaba así a los nativos de Antigua, después de que esta ciudad fue abandonada por la actual Guatemala, y sus habitantes debieron subsistir de la palta (avocado, guacamole). He visto que en inglés han traducido green belly o green tummy.
En México algunos siguen una dieta especial para cachorros, de ahí lo siguiente: “La panza verde es la panza sin blanquear, que solamente ha sido lavada en el rastro y no ha sido sometida a la acción abrasiva de la cal ni al proceso de raspado. De la panza verde solamente emplearás la primera y la última sección de las cuatro que componen el estómago de los rumiantes. Esta panza no va a formar parte de tu dieta en esta etapa sino hasta la siguiente”. No sólo rumiantes, hay también moscas de panza verde.
Pero según pude al fin averiguar, la zamba que compusieron Jaime Dávalos y el Cuchi Leguizamón parece referirse a un cacique llamado Panza Verde, del cual no tengo mas datos.
Cavan oscuros los bombos
el sueño de Panza Verde,
por un tiempo trasnochado,
Chaco adentro de la muerte.
Panza Verde muere solo,
bajo las quenchas del huete,
lo están velando la noche
y el filo de los machetes.
Hacia la luna ramosa
los polvaderales crecen,
mientras el baile jadea
debajo’ los urundeles.
La tierra no la velaron
como a una raíz caliente,
ochan los perros arriba
el aire por Panza Verde.
Su sombra le esta robando
la música de los cerros,
y para borrar sus pasos
silbando bagualas vuelve.
Hacia la luna ramosa...
lunes, 7 de noviembre de 2005
Carta de mi envío
Querido remitente:
Cuando te dejé, el 4 de noviembre a las diecisiete horas y cincuenta y un minutos, sabía que me esperaba un largo viaje. Con unos conocidos del barrio hice el camino hasta las oficinas del courier. Ahí conocí a mis compañeros de viaje y dos minutos antes de las once partimos todos rumbo a Miami. El avión bien. Al día siguiente, el sol de Florida nos regalaba su calor en Miami Gateway. Me despedí de mis amigos y conocí a los macanudos envíos con los que viajaría desde la noche. Partimos a las veintiuna y treinta rumbo a Panamá, que era escala. A las dos de la mañana con cinco minutos pasamos como un suspiro por Panamá City y llegamos para ver lo primeros albores, a las seis y veintisiete, en Maiquetía, Venezuela, país de destino. Me despedí de muchos de mis amigos, aunque con la mayoría nos fuimos para Caracas, a las oficinas del courier. Llegamos catorce y treinta y cuatro. Pasamos ahí la tarde y una buena noche. Hoy nos dijimos adiós, pues nos asignaron courier de entrega cuatro minutos antes de las ocho de la mañana. Te escribiré desde mi destino final. Saludos,
Tu envío.
domingo, 6 de noviembre de 2005
Los vasos
viernes, 4 de noviembre de 2005
Aclaraciones sobre las Bienaventuranzas
Pero el texto de ayer me sembró una duda. Por eso fui a "Las Parábolas de Jesucristo" de Castellani. Y hay que ver que el texto de "Stat Veritas" y su referencia a las promesas, donde dice que son todas el cielo, quizás no es tan correcto.
Los que dicen que todas las venturanzas se refieren a una sola cosa ("un diamante con ocho facetas", A. Jones, Verbum Dómini) es decir, a los justos, y a su premio en la otra vida, se las toman cómodo; así no hay dificultad, pero eso no es exégesis. Si Cristo quiso decir "los justos tendrán que sufrir pero obtendrán un gran premio en la otra vida, y aun a veces en esta", eso era un lugar común entre los hebreos desde Job; y Cristo podría haberse ahorrado el recitado. Evidentemente las ocho bendiciones se refieren a virtudes diferentes (aunque todas ellas deban juntarse en el justo) y a recompensas en (por los menos incoadas) esta vida; menos la última.
jueves, 3 de noviembre de 2005
Segundo cumpleaños
Alguna vez creo que se lo dije. Me miraba. “Dios te trajo”, le dije. “Te trajo al mundo porque te quiere, y te quiere con Él”.
Y nosotros te queremos. Te llamamos, le pedimos a Dios que vengas.
Recién empezás. Queda mucho por delante, si Dios así lo quiere. Miralo siempre como un camino, como un viaje.
¡Feliz cumpleaños!
En la tierra de los vivientes (cola)
Yo creo que contemplaré la bondad del Señor en la tierra de los vivientes. (Salmos 27, 13)
En una disputa, un T. de J. [Testigo de Jehová] para probar que la vida feliz y eterna de la "gran multitud" la gozará en la tierra, citó Mateo 5:4, que dice: `Bienaventurados los mansos porque ellos poseerán la tierra". Pero, ¿no notaba que en cada una de las 8 bienaventuranzas, Dios promete el cielo, llamado con distintos nombres? (reino de los cielos -tierra de los vivientes, prometida, símbolo del cielo - consuelo - saciedad - misericordia - visión de Dios - Hijos de Dios - Reino de los Cielos). Además dice que los mansos poseerán la tierra porque los mansos se ganan el corazón de todos.
miércoles, 2 de noviembre de 2005
Nella terra dei viventi
Hoy se lee ese Salmo, y me detuve en otros versículos (4, 13 y 14) que copio de la versión en castellano de “Evangelio del día”:
4 Una sola cosa he pedido al Señor, y esto es lo que quiero: vivir en la Casa del Señor todos los días de mi vida, para gozar de la dulzura del Señor y contemplar su Templo.Aunque no sé si hay un idioma con tanta polenta como el italiano para rezar un salmo como éste.
13 Yo creo que contemplaré la bondad del Señor en la tierra de los vivientes.
14 Espera en el Señor y sé fuerte; ten valor y espera en el Señor.