lunes, 4 de septiembre de 2006

Algo más que sólo tiene Sevilla

Luna, sol, flor y mantilla; una risa y una pena, y la Virgen Macarena. Un tesoro a cada orilla, la Giralda y sus campanas, la Esperanza de Triana. Y a Jesús del Gran Poder.
Ahora bien, me he enterado que hay algo más que tiene, o tuvo, Sevilla, y que ahora está con Dios. Se trata del Cardenal Spínola.
La obra que Dios hizo a través de un español allá por fines del siglo XIX y primeros años del XX, nos tocará de cerca dentro de poco tiempo cuando Francisco empiece a ir al Jardín de Infantes del Colegio Cardenal Spínola, que levanta sus aulas desde 1952 en una localidad del norte bonaerense.
El beato Marcelo Spínola y Maestre, Cardenal Arzobispo de Sevilla y Fundador de las Esclavas del Divino Corazón, nació en San Fernando (Cádiz) en 1835. Estudió y ejerció el derecho. Comenzó los estudios de Teología en 1858. Fue ordenado sacerdote en 1864, obispo en 1881 y creado cardenal por su Santidad Pío X, en el consistorio del 11 de diciembre de 1905, dejando este mundo al año siguiente. Juan Pablo II lo proclamó Beato el 29 de marzo de 1987 y según dicen, en su visita a Sevilla el 5 de noviembre de 1982, el Santo Padre oró ante su sepulcro, que visitó expresamente.
En la homilía en ocasión de su beatificación, Juan Pablo II destacaba sus virtudes, entre las cuales otros relatos que he leído destacan su preocupación por los pobres, manifestada ya desde su época de abogado, y su gran humildad.
Algunos cuentan que en una época “socorría a los pobres con su propio dinero, y, cuando lo necesitaba, con el de sus familiares, y, cuando tampoco es te le bastaba, pedía limosna por las calles, en los cafés y en las casas”.
Dice en el mismo artículo que sus numerosas obras (publicó pastorales, creó circulos obreros, sostuvo orfelinatos, fundó el periódico El Correo, fundó también la Cogregación ya mencionada) no fueron impedimento para que él, desde su humildad, se planteara en más de una ocasión la posibilidad de renunciar al episcopado, considerándose indigno e incapaz de este ministerio. “Y si no se retiró fue, entre otras cosas, por consejo de Della Chiesa, futuro Benedicto XV”.
Cerremos con el lema de su episcopado: “Todo lo puedo en Él” (Flp 4, 13). Y esperemos que el espíritu de su obra se manifieste claramente en este colegio de Argentina a donde irá nuestro hijo.

10 comentarios:

Ecazes dijo...

Te lo pedimos Señor

Juan Ignacio dijo...

Gracias por la oración, ya que yo sólo dije "esperamos" y aunque la esperanza sea cristiana, es importante también "pedirlo".

Anónimo dijo...

Hombre de fe,siervo de Dios,Apóstol de Jesucristo,y testigo de su amor.

Marcelo,tú fuiste libre,luchaste por la verdad,y florecieron tus manos,que no cesaron de dar.

Cada Enero le cantamos su himno a Marcelo en España.

El fue el Arzobispo Mendigo,fiel testigo de Dios

Anónimo dijo...

muchas, muchas gracias por el "link" a la letra de "que también es de sevilla," etc. hace varios meses que la busco. muchas gracias!!!!

Juan Ignacio dijo...

Me alegro de ver a dos anónimos uno exultante y el otro contento.

Anónimo dijo...

Y pensar que hoy, 19 de enero, todos los colegios Cardenal Spínola cantamos el himno al fundador...

Feliz día de Marcelo desde Barcelona!! :)

Anónimo dijo...

Y pensar que hoy, 19 de enero, todos los colegios Cardenal Spínola cantamos el himno al fundador...

Feliz día de Marcelo desde Barcelona!! :)

Juan Ignacio dijo...

¡Y pensar que acá son vacaciones! Sino seguro que lo cantarían aquí también.

Anónimo dijo...

yo estoy en el cole de las esclavas de linares fue fundado por marcelo spinola y celia mendez

Juan Ignacio dijo...

Gracias por comentar.

Mañana es fiesta, entonces, por lo que pude aprender con estos comentarios.

Lamentablemente los chicos no van más a ese colegio. Por razones que nada tienen que ver con el Beato, por supuesto, a quien sigo invocando en las jaculatorias al final de la oración.