El "castigo de las Obras Completas" funcionaría así: fascinado con la obra de un autor, vas y te comprás sus "Obras completas". Como si hubieras sido arrastrado por una especie de "gula", el pecado es luego castigado con la aparición de muchos libros, en mesas de usados o en librerías de moda, del mismo y admirado autor. Claro, ya deberías ser un fanático "de primera categoría" para comprarte obras repetidas. Pero no deja de tentarte esa nueva edición o ese usado con pintoresca tapa de antaño...
¿Cómo sublimar este deseo? Pues resultó que hay también un disco, miren. Y ya lo empecé a escuchar (empieza con Largo día de cólera). ¡Voz peculiar la de Marechal! Muy agradable.
1 comentario:
Es la misma sensacion como cuando compras unas Obras Completas y luego te enteras que no eran tan completas; o, peor aun, cuando (segun los que saben) la traduccion es malisima...
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